de Silvia Añover
ilustraciones de Atocha Sanz
Este es un cuento delicioso que invita a pasear de la mano de Semilla. La escena sucede en un pinar resinero del que solo quedan las cenizas. La protagonista se encuentra con Cárabo y Escarabajo, que le explican como era el bosque antes de que se quemara. Puede que parezca triste y apagado, pero en realidad alberga un potente mensaje.
Ya en la primera línea se puede percibir la Esperanza.
La historia está basada en un acontecimiento real. Hubo un incendio en Guadalajara hace diez años, y fue devastador.
Mi intención es que el lector se platee cuál sería su forma de actuar ante un desastre de dimensiones catastróficas. No necesariamente tiene que ser un incendio, ni un accidente medioambiental. Podría ser una pérdida o una situación angustiosa que parece no tener solución.
Semilla apuesta por la belleza y el amor romántico, que idealiza. Como lo pierde, se olvida de que ella tiene el papel más importante, resurgir de nuevo, volver a nacer.
Cárabo, en cambio, representa al sabio, al erudito que conoce muy bien la historia y la economía, pero que abandona por no encontrar nada que le dé de comer.
Escarabajo, en cambio, está ligado a la tierra, la ama incondicionalmente. Está acostumbrado a remover los desechos del sotobosque, y apuesta por seguir luchando, siempre hacia adelante, sin plantearse otro objetivo en la vida. Además sabe que no está solo, que hay muchos como él.
¿Quién prefieres ser?
Cuando suceden situaciones muy complicadas a nuestro alrededor, es el momento de arrimar el hombro,
y ayudar a que la vida siga.
Es vital que sigamos nuestro instinto
y brotemos de entre las cenizas.
De la Autora.